ISLAMABAD, Pakistán.- El nombre de Mohamed Mosa Khan figura en los registros de las autoridades locales junto a un frondoso prontuario. Está acusado de planificar un asesinato, amenazar a la policía e interferir en asuntos del Estado.
Sin embargo, todo es un error, ya que se trata de un bebé de tan solo nueve meses, que tuvo que presentarse a la citación de la justicia en brazos de su padre. Fue recién entonces cuando se descubrió la equivocación, que causó vergüenza entre los agentes.
Detalla la agencia “Europa Press” que el ministro principal del estado de Punjab, Muhammad Shahbaz Sharif, ha pedido al inspector general de la Policía de la provincia una aclaración inmediata y que tome "severas medidas" contra los oficiales que llevaron el caso.